Cuando he escrito el título de la entrada, me he acordado de una anécdota que que me contó mi padre hace tiempo. Durante la dictadura en España, en la que había un fuerte control sobre las publicaciones, un periódico decidió dedicar un trozo de la portada al siguiente texto:
Botín es a botón, lo cojín es a X, y me importa dos X, que me cierren la edición.
Obviamente, se la cerraron, pero aquí lo que nos interesa son los cojines y no las X, porque a base de juntar muchos de los primeros, Christiane Högner ha diseñado lo que parece el sofá más cómodo del mundo.
Lo-fi es un sofá hecho con cojines y sólo con cojines. En la imagen vemos uno hecho todo con cojines blancos, pero también hay otro muy curioso en la que cada pieza tiene un estampado diferente, dando lugar a un sofá muy llamativo.
Así a ojo, y si las matemáticas no me fallan, debe haber nada más y nada menos que 48 cojines (30 para la base y 18 para el respaldo y los brazos) supongo que unidos por algún sistema que les confiere rigidez.
Desde luego, a primera vista, parece el lugar perfecto para echarse una siesta infinita o relajarse tomándose un Mojito, aunque a lo mejor no es demasiado blando, quien sabe.
Desafortunadamente, de momento no se comercializa, sino que es un proyecto experimental en busca de sensaciones “lo-fi”, como contraposición a la “hi-fi” y la soluciones altamente tecnológicas.
Vía | Swiss Miss
Más información | Christiane Högner
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